Y seguimos mirando al cielo en busca de ese oro líquido que sigue sin caer en La Rioja, o como mínimo no cae todo lo que debería. Las sombra de las restricciones ya ha empezado a cubrir nuestras cuencas y es el sector agrícola el primero que ya está sufriendo las consecuencias. Pese a estar garantizada el agua de boca urbana durante los próximos meses, debemos empezar a concienciarnos de que si no llueve en abundancia, las restricciones tarde o temprano, terminarán llegando al medio urbano. Debemos concienciarnos y ser responsables sobre nuestro consumo de agua….mejor prevenir que curar.
NUESTROS EMBALSES ESTÁN UN 18% MÁS BAJOS DE LA MEDIA DE LA ÚLTIMA DÉCADA
Habitualmente uno de los parámetros intercomparativos más robustos en las medidas hídricas de una cuenca, son las medias de los últimos 10 años. Pues bien, actualmente podemos afirmar que estamos, de media, con un 18% por debajo de la media de agua embalsada en La Rioja en los últimos 10 años. Son 91,92 hm3 los que suman los 3 embalses de uso consuntivo en activo actualmente en la región, alrededor de 24 hm3 por debajo de lo que sería normal (en torno a 116 hm3). Sin embargo, no todos se encuentran al mismo nivel, como podemos ver en la infografía.
El embalse de Pajares es el que hace saltar de manera más evidente las alarmas, estando actualmente al mismo nivel que se suele alcanzar a finales de octubre, antes del comienzo de las lluvias de otoño. Se encuentra a poco más del 37% de su capacidad con 12 hm3 de agua embalsada, nada menos que un 45% menos de lo que debería ser normal en base a las medias registradas en la última década.
El embalse González-Lacasa preocupa por situarse alrededor de un 32% por debajo de la media con unos 10 hm3 menos de los que debería tener para la fecha. Niveles propios de mediados de agosto. Se encuentra a poco más del 57% de su capacidad, con 19 hm3 de agua embalsada.
El único embalse que da motivos para el optimismo es el de Mansilla, que se encuentra con un 3% más de agua embalsada de lo que solemos tener a estas alturas del año, con 61 hm3, próximo al 90% de su capacidad.
Hacemos también especial mención al embalse de Enciso, todavía en pruebas, pero que se encuentra al 100% de su capacidad con 46 hm3 de agua embalsada. Por lo que el agua en el Cidacos, caso de necesitarla, está garantizada.
EN ABRIL SEGUIMOS PERDIENDO AGUA EN LA RIOJA
Pese a las lluvias, algo más abundantes que el mes anterior, no se ha llegado a compensar con la demanda, especialmente en el embalse González-Lacasa, que pierde 1,17 hm3 de agua (alrededor del 3%). En el resto las mermas son menores porcentualmente, aunque Mansilla cede 820 millones de litros de agua (0,82 hm3) y Pajares 0,36 hm3, alrededor de 360 millones de litros de agua.
Ante una previsión incierta respecto a las lluvias, que no indica una situación abiertamente disruptiva con la situación de sequia actual, debemos empezar a concienciarnos en cerrar el grifo, o al menos no abrirlo con cierta frecuencia, pues puede llegar el día, no muy lejano, en el que el grifo sólo nos arroje «silencio».
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