Aunque desde La Rioja Meteo siempre nos hemos mostrado un poco escépticos antes las previsiones estacionales, abordamos desde una manera analítica e interpretativa lo que podría dar de sí este otoño 2024 tomando como referencia el modelo compuesto de COPERNICUS CS3.
Este modelo aúna cada una de las contribuciones que se emiten desde diversos sistemas de predicción estacional, por lo que digamos que es “la media de todos ellos”, que en general, este año suelen ir en la misma dirección. Hablamos de una media de composición entre el ECMWF (europeo), NCEP (americano), JMA (japonés), ECCC (Canadiense), DWD (alemán), Met Office (británico), Meteo-France (francés) o el CMCC (mediterráneo), entre otros.
Aunque apostamos por la robustez de las tendencias agrupadas mostradas, recordad que cualquier cambio en el patrón “habitual” de la atmósfera o la simple llegada de una DANA o BFA fuera de lo común, pueden cambiar de manera radical el signo de los siguientes mapas previstos para el TRIMESTRE OCTUBRE-NOVIEMBRE-DICIEMBRE.
Los siguientes mapas deben ser considerados siempre como tendencias generales. Es decir, que el modelo C3S indique que va a ser un otoño cálido y seco, no significa que no se vayan a producir situaciones de frío o de abundantes precipitaciones. Lo que indica es, qué anomalías se darán de media en los próximos 3 meses, en base a la climatología dibujada por el ERA5 (modelo de reanálisis climático).
ANOMALÍAS DE PRESIÓN Y GEOPOTENCIAL OCT-NOV-DIC 2024
A simple vista observamos que las altas presiones parecen querer dominar el atlántico, aunque ligeramente desviadas hacia el norte y este. Aunque obviamente este patrón no estaría estático durante 3 meses, sí que podríamos tener abundantes bloqueos atlánticos que pudieran derivar en ambiente relativamente tranquilo, en la mitad oeste peninsular, y algo más animado en la mitad Este, con incursiones puntuales de norte en posibles verticalizaciones de estas altas presiones hacia groenlandia o escandinavia cuando el jet stream afloje en altas latitudes.
Es decir, a vista del escenario previsto, parece que el tiempo en la Península Ibérica este otoño vendría condicionado por las altas presiones en el atlántico, que en algunos casos podrían dejar hueco por el sur, colándose algunas DANAs o borrascas (aunque no parece que vaya a ser demasiado frecuente) o favoreciendo descuelgues de aire frío en forma de pseudonortadas o norestadas al verticalizarse el de Azores en su posible unión intermitente con un anticiclón groenlandés o escandinavo. O incluso levantadas, al pancear estas altas presiones en europa. Además, esos geopotenciales algo más bajos que profundizan hasta el golfo de León y Génova, podrían indicar tendencia a descuelgues de aire frío a nuestra zona, aunque sobre todo hacia el mediterráneo central.
ANOMALÍAS DE TEMPERATURAS A 850 hPA Y 2 METROS
Pese a observarse una tendencia a temperaturas más altas de lo normal (entre un 60-70% de probabilidad en la Península Ibérica), si que se observa una onda que alcanzaría a casi toda Europa que de media sería más fría (dentro de la anomalía cálida), que se corresponde con esa configuración de altas presiones en el atlántico desplazadas hacia el Este y algunas pulsaciones de flujo de nortes o noroestes débiles en Europa.
No obstante, y pese a ser posibles esas pulsaciones frías esporádicas en Europa, a juzgar por los mapas sólo nos tocarían de manera tangencial a la Península Ibérica, especialmente al noreste. Recordemos que siempre dentro de un contexto más cálido como media de los próximos 3 meses.
ANOMALÍAS DE PRECIPITACIÓN
Volvemos a ver dibujado un mapa de anomalías de precipitación que indicaría que sería la mitad occidental de la Península Ibérica la que vería mermadas sus precipitaciones medias entre un 40/50% de probabilidad. Mientras que en la mitad este el signo sería neutro, es decir, llovería lo normal.
Las señales de superávit de precipitaciones en Escandinavia nos hace una idea de que el jet polar estará muy activo y agrupado, lo que resta esas conexiones de las anómalas altas presiones en el atlántico con las escandinavas. Parece a vista de estos mapas que será la conexión groenlandesa la que pudiera materilizarse de manera puntual. Las señales positivas en el centro de europa se corresponden con ese deslizamiento de bajas presiones o bolsas frías por el flanco este de las altas presiones al oeste del continente.
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