Y seguimos mirando al cielo en busca de ese oro líquido que sigue sin caer en La Rioja, o como mínimo no cae todo lo que debería. La cuenca del Iregua, la que más preocupa en estado de sequía prolongada y en estado de emergencia por escasez es la del Iregua, donde llevan desde primeros de año mirando al cielo. Aunque las previsiones son halagüeñas para lo que resta de mes en cuanto a lluvia, de momento seguimos muy por debajo de lo normal.
NUESTROS EMBALSES ESTÁN UN 22% MÁS BAJOS DE LA MEDIA DE LA ÚLTIMA DÉCADA
Habitualmente uno de los parámetros intercomparativos más robustos en las medidas hídricas de una cuenca, son las medias de los últimos 10 años. Pues bien, actualmente podemos afirmar que estamos, de media, con un 22% por debajo de la media de agua embalsada en La Rioja en los últimos 10 años. Son 87,52 hm3 los que suman los 3 embalses de uso consuntivo en activo actualmente en la región, alrededor de 30 hm3 por debajo de lo que sería normal (en torno a 118 hm3). Sin embargo, no todos se encuentran al mismo nivel, como podemos ver en la infografía.
El embalse de Pajares es el que hace saltar de manera más evidente las alarmas, estando actualmente al mismo nivel que se suele alcanzar a finales de octubre, antes del comienzo de las lluvias de otoño. Se encuentra a poco más del 34% de su capacidad con 12 hm3 de agua embalsada, nada menos que un 53% menos de lo que debería ser normal en base a las medias registradas en la última década.
El embalse González-Lacasa preocupa por situarse alrededor de un 41% por debajo de la media con unos 10 hm3 menos de los que debería tener para la fecha. Niveles propios de mediados de agosto. Se encuentra a poco más del 51% de su capacidad, con 17 hm3 de agua embalsada.
El único embalse que da motivos para el optimismo es el de Mansilla, pese a que se encuentra un 1,1% por debajo de lo normal, está próximo al 85% de su capacidad, bastante en línea con la capacidad de otros años a estas alturas.
Hacemos también especial mención al embalse de Enciso, todavía en pruebas y que recientemente ha iniciado su desembalse, que se encuentra al 100% de su capacidad con 46 hm3 de agua embalsada. Por lo que el agua en el Cidacos, está más que garantizada. Sin embargo, por si alguien se lo pregunta, este agua no podría utilizarse aguas arriba del Ebro, ya que lo impiden las leyes actuales.
EN LO QUE VA DE MAYO HEMOS PERDIDO LA CAPACIDAD DE 1760 PISCINAS OLÍMPICAS
Tomando como referencia que una piscina olímpica contiene alrededor de 2,5 millones de litros de agua, y en estos primeros 17 días de mayo hemos perdido alrededor de 4.400 millones de litros de agua (unos 4,4 hm3), el cálculo rápido nos indica que hemos perdido la capacidad de agua de unas 1.760 piscinas olímpicas.
Mansilla se deja más de un 4% con 2 hm3 menos que hace 2 semanas, mientras que González-LaCasa pierde un 6%, algo menos de 2 hm3. Pajares por su parte apenas pierde medio hm3, pero su situación es crítica.
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